TODA HISTORIA EMPIEZA CON UN
"HABÍA UNA VEZ"

PREGUNTAS QUE NOS HICIERON CRECER Y CREER

Todos los que contamos la vida a través de los perritos que nos han acompañado, guardamos amor extra en nuestros corazones. Criarlos, verlos crecer, jugar, alimentarlos, tiene un efecto perdurable y podríamos asegurar que nos hace mejores personas. ¿Será cierto?

¿Recuerdas la primera vez que un cachorro vino hacia tus pies y te mordió ferozmente el talón? ¿Su primer paseo fuera de casa? ¿Sus travesuras? ¿Recuerdas qué le diste de comer? Pues nosotros sí, lo recordamos todo. Éramos tan inexpertos como cualquiera.

Llegado el momento de alimentarlos, no teníamos muchas posibilidades. ¿Croquetas? ¿De qué marca?¿Por qué no las come? ¿Le doy un poco de mi comida mezclada con la suya? ¿Y si le cocino? Sospechamos una respuesta. No imaginamos que preparar una sopa casera despertaría en nosotros una curiosidad imparable hasta llegar el día de hoy.
Nuestro compañero incondicional nos regala siempre lecciones de lealtad, de ternura, pero también de salud y responsabilidad. Por eso, nunca dejamos de perfeccionar la cocina. Estudiamos con maestros de Chile, Argentina y Dinamarca; y la pasión nos encausó por la nutrición canina. La cocina fue el laboratorio y los mejores ingredientes fueron la materia prima para preparar, por fin, MAX , un estofado de sabor incomparable , saludable y llenito de amor.

Estamos seguros de que todos esos pequeños peludos que acompañan nuestras vidas, ladrarán a favor de la receta que hoy llega a sus platos. Verlos crecer con felicidad nos hace creer en una mejor humanidad.